Lobo de Rio PERU


HÁBITAT:

El Lobo de Rió habita en lagos y ríos en zonas remotas de la Amazonia, donde hay poca actividad humana, especialmente en los meandros abandonado, debido principalmente a que estos cuerpos de agua presentan poca corriente, y hay mayor visibilidad, alta densidad de pescado y menos variación en nivel de agua. Las cochas grandes son muy importantes por que permiten un mayor éxito reproductivo, también los ríos son utilizados pero el numero de crías parece ser menor. Los grupos de Lobo de Rio suelen utilizar mayormente los lagos, así también arroyos cercanos, ríos e incluso pantanos de palmeras, pero solo los lagos más grandes son capaces de albergar a una familia de Lobos de Rio al año.

COMPORTAMIENTO:

Los Lobos de Río son mayormente diurnos (actividad de día) y muy sociales. Pasan la mayor parte del día en el agua pescando, alternado con periodos de descanso, ya sea en la madriguera, en campamentos. Antes del anochecer toda la familia se dirige a la madriguera, para dormir durante toda la noche.
Las madrigueras son excavadas por los Lobos de Rio, y se encuentran en los bancos más altos de los lagos y ríos, dicha madrigueras tienen una o varias aberturas que conducen a la cámara en forma de ovalo. Los troncos caídos en borde de los lagos y áreas de tierra son usadas como letrinas, zonas de descanso o aseo.
Un notorio comportamiento que se puede observar es el periscopeo, donde el Lobo de Rio eleva la cabeza y el cuello fuera del agua, y esto es acompañado a menudo por sonidos, este comporta.

COMUNICACIÓN:

Siendo animales sociales, los miembros del grupo se comunica por una variedad de sonidos incluso silbidos, gruñidos, cliqueos, ronquidos. La única forma de identificarlos mediante la mancha de las gargantas, este comportamiento no significa que el animal es manso; al contrario, esta investigando y se siente alarmado, por estar demasiado cerca.

DIETA:

Los Lobos de Rio son piscívoros, (comen peces) consumiendo entre 3 a 4 Kilos al dia por nutria, la mayoría come peces de entre 10-30 cm de longitud, especialmente bocachico, bujurki y huasaco. Normalmente no comparten sus presas, pero solo lo hacen con las crías, ya que muchas veces se da que un adulto caza un pez y la cria hace sonidos muy ruidosos a manera de ruego para que el pez sea compartido.

ESTRUCTURA POBLACIONAL:

La población esta principalmente compuesta por grupos familiares que se basan en torno a una pareja monógama, que permanece en el territorio por varios años, con sus crías de años anteriores. Y en general forman grupos entre 3 y 9 individuos, grupos más grandes son poco frecuentes. Los adultos jóvenes en territorios ocupados lentamente se aparta del grupo de residentes y se convierten en solitarios que vagan, con otros dispersores igual a él en busca de pareja, de territorio vacante o unirse a un grupo.

REPRODUCCIÓN:

Normalmente tienen una acamada al año, en la época seca (entre abril y septiembre Madre de Dios). Solo la hembra reproductiva en cada grupo tiene crías siendo el periodo de gestación de 64 a 72 días pudiendo tener entre 1 y 6 cachorro, mayormente 2 a 4 sobreviven, puesto que la hembra solo tiene 4 pezones. Los cachorros nacen ciegos y empiezan a salir de la madriguera después de 3 a 4 semanas. Toda la familia cuida y alimenta a los cachorros. A los 2 meses los cachorros empiezan a mendigar ruidosamente por comida. A los 4 meses ya viajan y cazan con el grupo, lactan por lo menos hasta el 5to mes de edad y pueden atrapar sus propios pescados con más éxitos cuando tienen 10 meses. El grupo es más cauteloso y vulnerable cuando tiene crías.

FACTORES DE MORTALIDAD:

Sabemos poco acerca de la mortalidad natural de Lobos de Rio, muy raras veces se encuentra alguna nutria muerta. La mortalidad en adultos parece ser baja, no así en crías y dispersores que parece ser mucho mayor.
Enfermedades como el moquillo y la parvovirosis puede ser mortal para la especie. La especie tiene pocos depredadores naturales, no obstante en el agua siendo el principal predador el Caiman Negro, otros posibles depredadores podría incluir Anacondas, Pumas y Jaguares, mientras que las anguilas eléctricas y rayas pueden representar un peligro para las pequeñas crías. Sin duda, el principal depredador ha sido y sigue siendo los seres humanos, que siguen matando a pesar de la protección legal.
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